Se usaron 900 kilos de carne y 400 de patatas en 22 cazuelas cocinadas al fuego de la leña

Más de 2.000 personas se dieron cita en la mañana de ayer en Palacios de la Sierra, en el paraje conocido como ‘La Dehesa’, para participar en la tradicional caldereta popular y decir adiós a cuatro días de festejos en honor a Santiago, Santa Ana y la Virgen del Arroyal donde se han vivido momentos muy emotivos. Entre ellos, la pingada del mayo que se llevó a cabo como acto inaugural de las fiesta. Contó con la participación de todos los jóvenes del municipio. Se logró así perpetuar, un año más, una de las tradiciones más arraigadas de esta comarca.

Como colofón festivo ayer lunes, la cita fue con la gastronomía.

De hecho, se repartieron cerca de 2.500 raciones de caldereta, plato típico que fue sin duda el protagonista de la jornada. Los preparativos comenzaron al calor del fuego de la leña a primera hora de la mañana, de la mano de un equipo de veinte cocineros procedentes de Palacios y de otros pueblos cercanos, entre ellos Castrillo de la Reina.

Todos ellos fueron los artífices de la elaboración del plato para el que se usaron 22 calderas y cerca de mil kilos de carne. Explicaron que «a las 8,30 horas de la mañana hemos comenzado la preparación de este guiso para el que hemos necesitado 900 kilos de carne de ternera y 400 kilos de patatas», comentó a media mañana el cocinero Simón González, al que le avala una experiencia de 60 años haciendo este suculento plato en muchos de los pueblos de la zona donde este plato es muy apreciado. «Además, le hemos añadido pimientos, cebollas, tomates… una serie de ingredientes que son los que le dan el toque final a la carne», añadió.

Ya a las 14,30 horas de la tarde se dio el pistoletazo de salida para el comienzo del reparto de la carne entre todos los asistentes que, en familia o amigos disfrutaron de una jornada de convivencia y de buen ambiente. La jornada se completó con la música de una batukada y juegos populares por la tarde, dando paso por la noche a la verbena.

DEJAR LA RUTINA DE LADO

«Las fiestas son días de alegría y convivencia, en los que tanto las personas que vivimos en Palacios todo el año como las que están fuera, nos juntamos para pasar cuatro días inolvidables y dejar la rutina a un lado», confesó Estíbaliz Llorente, alcaldesa de la localidad, para la que el momento más significativo fue la procesión de Santa Ana el domingo. Y es que es un momento en que se vive la tradicional jota serrana con la que los mozos del pueblo demuestran una de las tradiciones más importantes de estas fiestas», explica.

Por otro lado, los vecinos de Palacios de la Sierra continúan indignados ante los lamentables hechos acontecidos en plenas fiestas, en concreto en la madrugada del sábado, cuando un joven de un pueblo vecino fue atacado con arma blanca en el abdomen en plena Plaza Mayor.

Los palancianos y palancianas quieren expresar su máxima repulsa hacia cualquier tipo de violencia y por ello han mostrado hasta el final de fiestas una pancarta en apoyo a la víctima, donde se hace hincapié en la total repulsa de todo Palacios de la Sierra hacia la violencia. «Se trata de un hecho lamentable producido por una persona que no está bien de la cabeza», confiesan los vecinos, donde es la primera vez que ocurre un hecho similar.

El agredido, un varón de 34 años, sigue en observación en el Hospital Universitario de Burgos, mientras que el presunto autor, un hombre de 44 años con iniciales R.H.I., fue detenido poco después por la Guardia Civil en las inmediaciones del lugar del suceso.

Fuente de la noticia: