La Junta de Castilla y León remite el proyecto a Quintanar y Palacios. En Canicosa y Regumiel ya han comenzado las obras y en Neila no se ha hecho nada.
La Junta de Castilla y León inicia el sellado y recuperación ambiental de los antiguos vertederos de los municipios que componen la Mancomunidad Alta Sierra de Pinares, en la franja burgalesa de la comarca. Aunque la inversión es cuantiosa, más de 1.300.000 euros, hay municipios que todavía no cuentan con el proyecto ni con fecha de ejecución, como es el caso de Neila. Paradójicamente este pueblo y su vertedero se encuentran dentro del Parque Natural Lagunas Glaciares de Neila.
“El antiguo vertedero está desastroso, en el paraje ‘La Mina’, a un kilómetro del pueblo. Hace mucho tiempo que deberían haberlo sellado”, denuncia el alcalde, Valeriano Arribas.
Algunas localidades, como la de Regumiel de la Sierra y Canicosa, han visto iniciadas las obras de sellado de sus vertederos, que se realiza de forma conjunta. “Pararon por el mal tiempo y ahora están en Canicosa, luego retomarán los trabajos aquí”, dice la primer edil zumelina, Isabel Andrés.
Otros Ayuntamientos, como el de Palacios y Quintanar de la Sierra, acaban de aprobar los proyectos y mantienen el período de alegaciones. Una vez terminado, la Junta, que costea el total de la obra, licitará los trabajos, que tienen una duración estipulada de seis meses.
En el municipio palanciano se sellarán 1.631 metros cuadrados de vertedero y se tratará un volumen de casi 5.000 metros cúbicos de basura, con una inversión de 329.000 euros. En Quintanar, con un presupuesto de licitación de 800.000 euros, se sellarán seis mil metros cuadrados con unos 30.000 metros cúbicos de residuos. Este vertedero aunque está inactivo, sigue recibiendo residuos inertes provenientes, en su mayoría, de labores de construcción.
“A partir de ahora, tal y como marca la ley española, los constructores deberán contratar a una empresa que gestione sus residuos, en lugar de tirarlos sin coste. Van a pasar de la comodidad a la ilegalidad si lo hacen, pues se va a aumentar la vigilancia allí y se sancionará a quien vierta”, avisa David de Pedro, alcalde quintanaro. Quintanar aprovechará este proyecto aún más que otras localidades, pues su vertedero está en el acceso a las necrópolis, lo que daba una imagen poco agradable al turista. “Se recuperará el espacio y se convertirá en un lugar visitable y agradable, es el doble impacto positivo del proyecto de sellado”, continúa el primer edil burgalés.
Los espacios se limpiarán de ratas e insectos y basura orgánica e inerte. En general, las tareas se centrarán en la impermeabilización del vaso para evitar la salida de los lixiviados, que se drenarán hasta un pozo, la reubicación de los residuos y la regeneración de la superficie con replantación de especies autóctonas.
ÁREAS DE APORTACIÓN. Cabe resaltar, en cuanto a las áreas de aportación de puntos limpios, que su coste de construcción es sufragado entre cada Ayuntamiento, con un 30 por cien, y el gobierno regional, que aporta el resto. A Neila, por ejemplo, le ha supuesto unos 15.000 euros.