CARMELO GARCÍA / Salas
La XIII Ruta Carreteril organizada por la Real Cabaña de Carreteros, en su empeño de promover actividades que potencian el valor de los recursos naturales, y la tradición en sus diferentes vertientes, llega hoy al monasterio de San Pedro de Arlanza, después de recorrer, desde Quintanar de la Sierra, durante tres días, cerca de 60 kilómetros.
Y en ese sentido se leerá un documento, en el que se refleja el hecho histórico de la donación, en 1213, por parte del rey Alfonso VIII, de diferentes villas serranas al cenobio de San Pedro de Arlanza, a cambio de los terrenos del Hospital del Rey, propiedad de los monjes benitos.
Pero antes de pisar los dominios monásticos, los participantes en la marcha habrán partido, a las primeras luces del alba, desde Hortigüela hacia Mambrillas de Lara para contemplar la instalación ‘Enraizados’ en la dehesa de robles centenarios.
Este año, la organización ha basado la iniciativa en el 1.100 aniversario de la fundación del monasterio de San pedro de Arlanza, y su vínculo con la zona de Pinares plasmado en los eremitorios y en las necrópolis alto medievales del Arlanza.
En ese sentido, en la jornada del jueves se llevó a cabo un recorrido pedestre, con escolares serranos, por las necrópolis de Cuyacabras y Revenga, de Quintanar de Sierra, y en la del viernes, ya de camino con las carretas, se visitaron las dependencias del Centro de Interpretación de las Necrópolis, ubicado en Palacios de la Sierra, y el paraje de Santiuste, Castrillo de la Reina.